Queda poco más de un mes para el inicio de una nueva edición del Belén Viviente. Este año nos hace mucha ilusión poder volver a vivir esta tradición tan arraigada en casa nuestra, sin restricciones.
Después de dos Navidades complicadas a causa del coronavirus: el primero donde tuvimos que cerrar las puertas del pesebre porque todos y todas estábamos medio confinados y el segundo, que lo tuvimos que llevar a cabo con restricciones. Este año podemos volver a vivirlo de la mejor manera, sin distancias ni mascarillas. Este hecho nos permitirá poder darle más luz y magia a todo el recorrido, hacerlo más próximo y dinámico, con mucha ilusión, tal como nos gusta.
Sabemos que será mágico poder volver a descubrir aquellas sonrisas que se escondían detrás las mascarillas, tanto de los figurantes como de los visitantes. Porque cada sonrisa es un regalo para todos nosotros y nos da fuerzas para seguir, año tras año, preparando el gran Pesebre Viviente de Castell d'Aro.
¿Estáis preparados para vivir la ilusión y la magia con nosotros?